Según
el diccionario y de manera estricta nos comenta que la aculturación se refiere al resultado de un proceso en el cual una
persona o un grupo de ellas adquieren una nueva cultura (o aspectos de la
misma) generalmente a expensas de la cultura propia y de forma involuntaria.
Las definiciones viejas y nuevas tienen una frontera borrosa en las sociedades
multiculturales modernas, en las que los hijos de familias inmigrantes pueden
ser motivados a adquirir la cultura dominante, pero también la familiar,
considerando a cualquiera de las dos como la extranjera, cuando ambas son parte
del desarrollo infantil.
PROCESO DE DUELO
Todo emigrante
se ve sometido a una serie de procesos de duelo tras el fenómeno migratorio
debido a la pérdida de elementos muy significativos en su vida como son:
• La familia
extensa y amigos, que generalmente permanecen en el lugar de origen y que constituyen su
red social fundamental. En muchos casos, incluso la familia nuclear reside en
el país de procedencia, con lo que la adaptación va a resultar precaria.
• La
identidad nacional, representada por un conjunto de circunstancias como el idioma, la
cultura, y el grupo étnico original (en muchos países africanos y asiáticos,
donde las fronteras las trazaron los países colonialistas occidentales a
tiralíneas, la identidad no se refleja tanto con el país sino con uno de los
varios grupos étnicos que conviven en él). Esto es lo que permite al individuo
sentirse miembro de su grupo y estructurar su individualidad según esta
pertenencia.
• Estatus
social. Los
emigrantes suelen ser personas con un buen nivel de formación o habilidades, y
muchas veces no se les reconoce en el país de acogida, donde se necesitan
trabajadores de menor formación profesional, o bien tienen dificultades a la
hora de convalidar su titulación, etc.., lo que a menudo produce un descenso
importante de estatus social, de su autoestima, que sumado a sus lógicos
sentimientos de desarraigo lo recluyen en un laberinto emocional complejo.
Según Achotegui (2000), en la migración aparecen siete duelos que son
los que se describen en la siguiente tabla:
Estos duelos van variando a lo largo de la evolución del mismo proceso
migratorio. En las primeras etapas del proceso, el duelo por la familia, el
estatus social y los riesgos físicos son los que tienen un mayor peso, sobre
todo cuando la migración ha resultado dificultosa. Con el transcurso del tiempo
estos sentimientos tienden a mitigarse y adquieren más importancia los problemas
con la lengua, la cultura, el contacto con el grupo y el concepto de lo
familiar.
RESPUESTAS A LA CULTURA DEL PAÍS ANFITRIÓN: LA ACULTURACIÓN
Cuando dos
culturas entran en contacto se habla del fenómeno de la aculturación.
El inmigrante,
miembro de una cultura minoritaria, debe adaptarse a la cultura mayoritaria del
país de residencia. El proceso de adaptación del emigrante a la cultura del
país anfitrión incluye sólo las cuatro alternativas básicas posibles que se
presentan en la siguiente tabla (Ekblad, Kohn y Jansson, 1998).
Las sociedades occidentales, sobre todo las europeas, aunque teóricamente
defienden un proceso de integración de los inmigrantes (es decir, de manejo
adecuado de ambas culturas, la de origen y la del país huésped), realmente lo
que pretenden por obra o por omisión es un proceso de asimilación (pérdida
progresiva de la cultura de origen y sustitución por la cultura del país
huésped).
Esta actitud se encuentra presente incluso en países con gran tradición de acogida de inmigrantes como los Estados Unidos. Quizás Canadá sea uno de los pocos países en el que desde las Instituciones, se defina claramente un proceso de integración.
Esta actitud se encuentra presente incluso en países con gran tradición de acogida de inmigrantes como los Estados Unidos. Quizás Canadá sea uno de los pocos países en el que desde las Instituciones, se defina claramente un proceso de integración.
FACTORES QUE INFLUYEN EN EL PROCESO DE ACULTURACIÓN
Los factores que
condicionan el proceso de adaptación son varios:
• Semejanza de las culturas. Facilita la
adaptación porque minimiza el choque cultural (Furnham y Bochner, 1982;
Mumford, 1998). En el caso concreto de España, el choque cultural es menor en
inmigrantes de culturas occidentales y de Latinoamérica, mientras que el máximo
en individuos de entornos asiáticos y africanos (magrebíes y subsaharianos).
• Receptividad. Puede variar desde
abierta y receptora hasta claramente xenófoba. En Europa hay países que tienen
escasa tradición de acogida de inmigrantes, siendo que en sus propios genes
está el haberlo sido también emigrantes. Y hoy, la vida se encarga de dar una
bofetada a la mala memoria y vuelven los nietos a imitar a sus abuelos en su
búsqueda de un mejor futuro en aquellos países hasta ayer “marginados”.
• Edad del individuo. Los adolescentes
tienden más a la asimilación, negando la cultura de origen (que también es la
de los padres, con los que se suele entrar en conflicto) para parecerse más a
su grupo de edad, que mayoritariamente pertenece al país huésped. Las personas
mayores son propensas a adaptarse mediante la separación, negando la nueva
cultura y parapetándose en la propia. Los individuos de edades medias son los
que más fácilmente realizan procesos de integración de ambas culturas. Como es
evidente, estas diferentes velocidades e intensidades de aculturación van a
producir conflictos familiares e intergeneracionales. Sin entrar en temas como
los posibles problemas matrimoniales donde esas velocidades, tiempos y
situaciones de cada integrante harán en mayor o menor medida tensar o aflojar
esa soga al cuello.
• Personalidad del individuo. Influye en
su adaptabilidad al cambio y en los mecanismos de afrontamiento que debe
utilizar. Cuantas menores carencias afectivas haya padecido y menos vulnerable
sea el individuo, mejor y más rápidamente va adaptarse a las dificultades del
proceso de aculturación.
Evidentemente las circunstancias favorables harán que el individuo viva con mayor intensidad y espíritu de éxito, en cambio si los inconvenientes se encuentran desde la puerta de embarque y lo acompañan por mucho tiempo, el proyecto dejará de ser suyo, también dejará de ser suyo su entorno, sus ilusiones, sus expectativas, y ese laberinto dará luces de alarma.
Evidentemente las circunstancias favorables harán que el individuo viva con mayor intensidad y espíritu de éxito, en cambio si los inconvenientes se encuentran desde la puerta de embarque y lo acompañan por mucho tiempo, el proyecto dejará de ser suyo, también dejará de ser suyo su entorno, sus ilusiones, sus expectativas, y ese laberinto dará luces de alarma.
Los diversos programas de Viajeros por el Mundo siempre nos muestran una
parte hasta lúdica del proceso de integración en otras sociedades… ¿y luego
que saludan y se apaga la cámara?
Los procesos de expatriación, de movilidad, de migración o inmigración llevan aparejadas muchas más cosas que un resultado económico o desarrollo profesional: las personas, su entorno, sus deseos, sus anhelos, su familia, hijos, padres, abuelos, amigos, recuerdos, sueños, proyectos, etc. Seguramente no podremos contemplar todos estos detalles como empleadores o como protagonistas de esa migración/inmigración, pero si podremos ser capaces de dar el apoyo, la ayuda desde el lugar que nos toque (empresa o institución pública).
Los procesos de expatriación, de movilidad, de migración o inmigración llevan aparejadas muchas más cosas que un resultado económico o desarrollo profesional: las personas, su entorno, sus deseos, sus anhelos, su familia, hijos, padres, abuelos, amigos, recuerdos, sueños, proyectos, etc. Seguramente no podremos contemplar todos estos detalles como empleadores o como protagonistas de esa migración/inmigración, pero si podremos ser capaces de dar el apoyo, la ayuda desde el lugar que nos toque (empresa o institución pública).
Puede que hoy debamos organizar una expatriación en nuestra empresa, o puede que nos toque ayudar a un expatriado a integrarse, o puede que se nos vaya un amigo a otro país con o sin trabajo previo, o puede que en nuestros círculos conozcamos a alguien que recién ha llegado con las manos llenas o vacías…solo recordar que la vida es dinámica, el mundo es cada vez mas cambiante y se encuentra herido en estado de caos, y que en ese lugar puedes estar tu, yo, o alguien de tus afectos.